I'm back*

Ya estoy en Buenos Aires, descansando de dos semanas de viajes de trabajo. Fueron 10 despegues y 10 aterrizajes, 6 aeropuertos diferentes en los cuales estuve en total 14 veces. Todo en los últimos 15 días. Créanme, estoy un poquito cansado. Lo bueno es que todo salió bien, sin problemas de importancia. Anécdotas y hechos para contar: Ya mencioné antes el "menú parlante" en el restaurant de Barquisimeto y el feriado sopresa que me hizo perder un día de trabajo y de turismo también porque todo estaba cerrado. En Venezuela, especialmente en Caracas, todo el mundo está desesperado por conseguir dólares. Por ejemplo, aunque no se puede, te cobran la tasa de aeropuerto en dólares. Claro que esos billetes se los quedan los empleados y ellos ponen la moneda local (Bv.F. = bolívar fuerte). Casi en ningún lugar se puede pagar con American Express lo cual me trajo algunas complicaciones que fueron salvadas por mi anfitriona, quien también embolsó algunos dólares que yo tenía disponibles. Gracias por la ayuda financiera, "A.". En Perú, además del trabajo, sólo pude pasar un par de horas en el shopping que estaba frente al hotel haciendo unas pocas compras. En Lima me sorprendió gratamente la ampliación y/o repavimentación de algunas avenidas importantes, lo cual mejoró el aspecto y el tránsito. Lo malo de Lima, especialmente de los taxistas, es que manejan muy muy mal. El remisero que me llevó del aeropuerto hasta el hotel iba como a 80-90 km/h dentro de la ciudad. Estuvo a punto de chocar unas tres veces ¡Un animal! En fin, fue un poco más de la rutina de los últimos meses. No mucho más para contar, excepto lo que ya conté. ¿Y por casa cómo andamos...? *Estoy de regreso