viernes, 27 de mayo de 2011

Hormigas desorientadas

Hormigas hay en todos lados. También en los desiertos.

El desierto del Sahara es muy caliente de día y las hormigas que cazan durante el día deben ser muy rápidas para salir del nido, buscar alimento y regresar al mismo sin morir disecadas en el intento.

Pueden recorrer varios metros, por ejemplo unos 50, y regresar en pocos segundos/minutos. Varios científicos se preguntaron cómo lo hacen, es decir, cómo se orientan y encuentran tan fácil y rápidamente la entrada del nido.

En el caso de esta especie del Sahara, demostraron que lo hacen contando los pasos que recorren hasta llegar al alimento. Luego dan vuelta y cuentan los mismos pasos hasta llegar al nido.

Lo interesante es que no tienen noción de la distancia, sino que CUENTAN los pasos. Y los científicos lo demostraron modificando la longitud de las patas de de esos bichos.

Las dejaban ir hasta el alimento, allí les agregaban unos diminutos zancos en cada pata (zancos tamaño hormiga, claro) y las dejaban regresar: las hormigas pasaban la entrada del nido como colectivo lleno… contaban los pasos y continuaban más allá del nido porque no medían la distancia sino la cantidad de pasos y como ahora tenían patas más largas recorrían distancias mayores. ¡qué taradas!

Los ejemplares menos afortunados participaron de la otra versión del experimento: la de las patas cortas, que nunca llegaban al nido, se quedaban buscando la entrada a mitad de camino.

Esto me hace acordar al cuento del científico que le arrancaba las patas a una cucaracha de a una por vez y observaba cómo éstas se acercaban a él cuando las llamaba. Luego de arrancarle todas, llegaba a la conclusión de que las cucarachas sin patas eran sordas porque no venían cuando las llamaba.

P/D: ningún científico fue maltratado ni dañado durante la realización de estos experimentos.

§

No hay comentarios:

Publicar un comentario